martes. 07.05.2024

A pesar de que aún restan varias semanas para la conformación de Frentes electorales y la presentación de listas de precandidatos, Víctor Aiola parece definirse por una de las tantas cartas y desordena un juego que, a partir de ahora, no le sirve a nadie o mejor dicho solo le sirve a Aiola. Las denuncias de corrupción, la salida apresurada de Juan Carlos “Pipo” Gómez , luego la renuncia voluntaria de su Secretario de Hacienda, Esteban Guida, y en los últimos días la causa por narcotráfico dentro de los calabozos, más una nueva ola escalofriante de robos e inseguridad que se llevará puesto al Secretario de Seguridad, Darío Ciminelli, obligaron al Jefe Comunal a pensar en el retorno a su consultorio que seguramente inaugurará en Avenida Saavedra y Maipú. Primero, hubo intentos por conseguir un candidato con supuesta potencia electoral que pudiera saltar las inevitables peleas que dispara la “decisión” de Aiola de no ir por un tercer mandato. En más de una oportunidad, el ingeniero y empresario Pedro “Pilo” Rojas, fue visitado y tentado para ocupar el principal despacho público de la ciudad. Rojas, que fue militante en los años 80 y principios de los 90, e incluso presidente de la Juventud Radical, en todos los casos rechazó el convite que le hicieron llegar. A partir de ahí, y en tanto el mismo Intendente se ocupó de hacer circular su intención de no competir por un nuevo mandato, comenzaron las danzas de nombres, que solo por la UCR tiene casi media docena de anotados, más los que terminen ofertando sus socios macristas. Lo cierto, es que ayer trascendió que Víctor Aiola habría definido su apoyo por el presidente de la bancada de concejales radical-macrista. El ex Secretario de Gobierno, Alejo Pérez, sería la apuesta para retener el Municipio por cuatro años más. Si bien todavía el actual mandamás del Gobierno local no oficializó ninguna de todas las versiones, por ahora deja en claro que detrás de sus pasos difícilmente vuelva a crecer el pasto. La apresurada operación de prensa para manifestar el apoyo por uno de sus correligionarios, sólo profundiza el encono y las tensiones que naturalmente surgen por las legítimas aspiraciones de cada uno. Nadie sabe si Aiola tiene definitivamente resuelto cuál será su lugar en el mundo a partir del 10 de diciembre. Por ahora está claro, que su decisión es tirar del mantel de la extensa mesa ubicada en el centro de la Casa Radical. A la pasada, se lleva todo puesto. Todo. 

 

 

Aiola tira del mantel