Luego de un mes de su adiós al banquillo de Boca, Battaglia volvió a hablar para los medios y se refirió a lo que fue su pasó por el club y distintas situaciones que fueron pasando en el medio. También habló de su futuro y si le gustaría tener un segundo ciclo en el equipo de La Ribera
"Estoy bien, ocupando la cabeza en otras cosas y haciendo el balance de lo que se hizo. Agarramos en un momento difícil del club y pudimos clasificar a la Libertadores y ganar la Copa Argentina. En lo futbolístico por un momento lo hicimos mejor y en otros fuimos irregulares", contó el ex DT de Boca para TyC Sports como vive sus días fuera del club.
Battaglia le dio importancia a los proyectos a largo plazo, que son difíciles de cumplir en el fútbol argentino, pero que son necesarios, "Hubo momentos en que cada partido parecía que era el fin del mundo. Del ganar a perder cambiaba todo demasiado rápido. Soy un convencido que los procesos deberían llevarse con tranquilidad. Hace poco lo dijo Gallardo. Creo que hay que creer en los proyectos".
También hizo referencia a la polémica frase sobre los refuerzos post eliminación de Boca con Corinthians, que no cayó bien para un sector de la dirigencia, "En ningún momento quise decir que Boca necesitaba muchos refuerzos. Nunca lo había dicho públicamente, pero sí puertas adentro. Todos los técnicos dicen que necesitan refuerzos. El momento puede que no haya sido el correcto, pero respondí una pregunta que me hicieron".
Tomó su postura por la reunión entre los jugadores y el Consejo por los premios, "Creo que son cosas que tienen que estar resueltas desde principio de año. Uno tiene que tener la cabeza en lo que pasa en la cancha. Creo que se llegó a un punto en el que no se tenía que hablar. No creo que haya afectado a los jugadores, competimos bien y merecimos pasar. Por esas cosas del fútbol no se dio".
Battaglia hizo un análisis del rendimiento del equipo durante su mandato, "Por momentos hemos encontrado el funcionamiento. Apenas me tocó llegar hemos tenido pasajes de buen fútbol y después tuvimos altibajos. Se hace difícil sostenerlo. En el último tiempo habíamos encontrado una manera y veníamos en levantada. El equipo había mejorado mucho".
Contó, lo que fueron para él, sus mayores acierto a cargo de la dirección técnica del club, "Hubo decisiones donde se notó el funcionamiento del equipo; darle la posibilidad a Luis Vázquez en esos primeros partidos, haciendo goles y después no solo también el darle oportunidades a Varela, sino también a otros juveniles".
En los últimos años se instaló que la Copa Libertadores es una obsesión para el mundo Boca y al volverse tan esquiva, es una obligación poder levantar nuevamente el trofeo, "La Libertadores se ha transformado en una obsesión y es un error. Hoy está cada vez más complicado, los equipos brasileños están muy fuertes. Ojalá Boca pueda volver a ganarla, pero que sea una obsesión hace que pasen estas cosas, donde parece que es lo único que importa. Cuando quedás afuera de la Copa, parece que lo demás no sirve".
Por otro lado, habló de cómo es su relación con el Consejo y las charlas que mantenían a menudo, "Siempre se habla de fútbol y de los partidos, al día siguiente. Siempre hay diferencias de opiniones, es lógico. Son ex compañeros y uno puede hablar con claridad. Hemos compartido muchas cosas, pero es difícil a veces que puedan coincidir seis personas".
Ahora sin equipo espera por alguna oferta para seguir dirigiendo, "La idea es escuchar las propuestas que puedan aparecer. Quiero seguir creciendo como entrenador". En sintonía, agrego si le gustaría tener un segundo ciclo en el club, "Veremos cómo se da el día de mañana, pero no le cierro la puertas. Boca es mi casa y lo pongo por delante de todo".
