Luego de conocerse el fallo de la Suprema Corte de Justicia, a través del cual queda firme la sentencia que permite al municipio de Chacabuco recuperar el predio que ocupa la firma Cirigliano S.A, Cuatro Palabras habló con el Dr Gonzalo Villagran, uno de los letrados que actuó en representación del municipio, quien hizo un secuencia cronológica del proceso judicial.
“Nosotros comenzamos con una apelación que se presentó en la Cámara respectiva en el año 2019 y conseguimos un falló a favor del municipio. La firma, Cirigliano, no estuvo de acuerdo en acatar esa decisión e hizo uso del derecho de presentar un Recurso Extraordinario ante la Suprema Corte de la Provincia.En diciembre de 2022 la Corte dictó la sentencia confirmando el fallo de la Cámara, a través del cual nos permite restituir el inmueble en cuestión”, explicó Villagrán.
No hubo nueva apelación
Mientras tanto, si bien la empresa Cirigliano tenia la posibilidad de presentar un Recurso de queja, finalmente no lo hizo y la sentencia de la Corte Provincial quedo definitivamente firme.
“Estábamos esperando porque podía ser que la firma, después de la feria judicial -la sentencia la notificaron el 29 de diciembre- presente el Recurso en Queja como última instancia y entonces el expèdiente iba a la Corte Suprema de Nación. Como eso no ocurrió, el expediente volvió al Departamento Judicial Junín y entonces pudimos acceder al mismo.De ahi confirmaos lo que actualmente se mantiene como un derecho de retención a favor de la demandada en virtud del reclamo de la empresa a que se le restituya el dinero puesto en inversiones”
“Hay facturas en australes”
Si bien tanto la Cámara de Apelaciones como la Suprema Corte, le dieron la razón al municipio de Chacabuco, se le reservó el derecho de retención del inmueble a la firma Cirigliano S.A hasta que se haga efectivo el pago de las mejoras que manifestaron hacer en el edificio -gastos de pintura, reparación de ventanas, instalación de vidrios, un horno de fundición-. Respecto a está cuestión, Villagran explica que ahora “hay que ponerse de acuerdo en cuáles son las mejoras que se reclaman y el valor de las mismas, porque hay hasta facturas del año 1987 en australes. Una vez cerrada esa negociación podemos tomar posesión. De todos modos es importante resaltar que definitivamente el predio y todas sus instalaciones son patrimonio del estado municipal”.
