A pesar de que el horario elegido para la realización del homenaje a Eva Peron en el 71 aniversario de su fallecimiento, encontraba a cientos de militantes o simpatizantes del peronismo local en sus actividades domésticas, ayer la casa peronista vibró como en su épocas de esplendor. Julieta Garello, abrió el acto destacando las distintas dimensiones de la figura de Eva Perón, haciendo énfasis en la vigencia de su figura en la acción de los militantes peronistas, en la cercanía con su pueblo y en la conducción política que ejerció. Además, manifestó que "Darío, en su cercanía con vecinos, tiene esa misma premisa que nos enseñó Eva, la de estar siempre al lado de la gente".
Luego llego el turno de Romina Barbetta, quien se refirió a la importancia de la representación de Eva Perón como figura mundial, como reconocimiento del mundo al pueblo argentino y de cómo cambió nuestra historia.
“Tenemos que llevar adentro el fuego de Evita”
Las elecciones están a la vuelta de la esquina. Los resultados aparecen luego de que el pueblo se expresa a través de su voto y recién ahí se sabe quién gana o quién pierde. Mientras tanto, en las diferentes actividades de los candidatos se puede semblantear el escenario, palpitar su resultado y hasta hacer apuestas. Los rostros, las caras nuevas que se mezclaban con viejos militantes que llevan sobre sus espaldas triunfos y derrotas, el escindido discurso del dos veces intendente de Chacabuco, hacen sospechar que los ánimos están bien arriba. El cierre del acto en homenaje a los 71 aniversario de la muerte de Eva Peron, estuvo a cargo del Presidente del PJ Chacabuco, y precandidato a Intendente por Unión por la Patria. Darío Golia comenzó su exposición haciendo referencia a la historia de Evita y recordó palabras de un compañero quien le manifestaba que el busto de Eva Perón, estaba abandonado en el palacio municipal. “Yo le respondí: ‘Compañero, no está olvidado en el municipio, nos está esperando a que volvamos el 10 de diciembre a gobernar los destinos de Chacabuco’”, en ese arranque, Golia entusiasmó a los cientos de militantes, la mayoría de mujeres, algunas con sus niños en brazos. Durante todo su discurso, el actual titular de Trenes Argentinos, fue y vino entre la historia de Eva y el presente que le devolvió el contacto y el calor de miles de chacabuquenses que sueñan con volver a un tiempo mejor. "Cada uno de nosotros y nosotras tenemos que llevar adentro el fuego de Evita, para poder transformar la realidad de los chacabuquenses", terminó diciendo Golía cuando sus últimas palabras se perdían entre el bullicio de algarabía y los aplausos.
