-¿Te adaptaste a la tarea legislativa o te sentías más cómodo en el Ejecutivo?
-Fue un año de mucho aprendizaje, es totalmente diferente la tarea legislativa. La velocidad de la gestión hace que uno esté constantemente en movimiento, que los temas pasen rápido, y que un tema lleve al otro. Y en el Concejo, tal vez, un tema arranca en una sesión y termina de tratarse veinte días después en otra. Es parte de las instituciones y es fundamental poder trabajar así.
Exige de la escucha de los distintos bloques y ciertos consensos que muchas veces no se dan, pero la discusión es válida. Exige tener más paciencia y más tolerancia, en ese sentido me ha aportado mucho. En lo personal, probablemente me guste más la tarea del Ejecutivo, por la dinámica.
-Respecto a generar consensos, ¿te toca construir consensos hacia adentro como presidente del bloque de Juntos?, ¿es necesario direccionar las decisiones en función de las demandas del Ejecutivo?
-Por supuesto que como bloque oficialista apoyamos la gestión. De hecho, varios de los que estamos en el Concejo hemos sido parte del Gobierno. Eso no quita que puertas adentro, y dentro del bloque también, marcamos diferencias y cosas que creemos que se podrían resolver de otra manera. Somos diez concejales y no siempre pensamos lo mismo. Pero no hay diferencias a la hora de defender una gestión que valoramos positiva.
-Durante el 2022 se han presentado varios pedidos de informes, y a diferencia de otros tiempos, el oficialismo ha acompañado y ha dado lugar a que se realicen. De todas formas, llega un punto en el que se desconoce el recorrido, las respuestas, y la sociedad no termina de saber que pasó, ¿cómo se resuelve?
-Cuando los pedidos de informes son justificados está bien que los acompañemos, que sean aprobados. Fue la conducta del bloque durante todo el año. Algunos obtuvieron respuesta, otros no. Pero entiendo que a veces son usados desde el bloque opositor para hacer campaña política, muchas veces intentan instalar temas desde ahí, poniendo mantos de sospecha sobre cualquier actividad que se haga. En ese ida y vuelta, puede fallar la comunicación. Me parece que es responsabilidad del cuerpo ser más concretos en esa comunicación. Es algo en lo que hay que trabajar más todavía.
-Hay una lógica instalada en el funcionamiento oficialismo-oposición, y se perjudica la sociedad, cuando no sabe si hay especulación política o intención de esconder algunos actos de Gobierno que pueden estar observados por falta de transparencia. El último pedido que se presentó estaba relacionado con la recepción de tosca o tierra, se dio lugar y se está analizando.
-En primer lugar, se dio lugar a ese pedido de informes. En segundo lugar, no creo que mandar a analizar la recepción de esa entrega de razón al pedido de informes. Todo lo contrario, se trata de poner otra voz en lo que para el Municipio estaba bien hecho. Y para que la sociedad esté tranquila, y en todo caso si hubo una falla del proveedor, que se haga cargo. No creo que la sociedad esté sospechando de los actos de Gobierno. Lo que se ha hecho en el Municipio tiene que haber cumplido con los procesos formales y hay un Tribunal de Cuentas que evalúa cada año las operaciones del Municipio. Puede ser la visión de una parte de la sociedad. Es un juego político del Frente de Todos, y es válido, pero no me parece que no represente a la comunidad.
-Si hay un espacio que se maneja de acuerdo al termómetro social es Juntos por el Cambio, y hoy el conjunto mayoritario de la sociedad opina que la dirigencia política está involucrada en actos de corrupción o falta de transparencia, ¿cómo se sale de acá?
-Eso pasa por el hartazgo de la sociedad con la clase política, porque no le ha traído soluciones al país y porque ha habido casos de corrupción enormes. Además, la dirigencia tiene privilegios, y en la medida en que eso no se reduzca, por supuesto que la gente va a estar con todo el derecho de menospreciar a los políticos. Yo me hago cargo de mis acciones y estoy muy tranquilo con eso. Es lógico que en una sociedad en la que muchísima gente no llega a fin de mes, se noten esos privilegios. El error es creer que se puede solucionar con menos políticos. Lo que hay que tener es mejor política, más participación ciudadana, más gente comprometiéndose.
Medioambiente, ARDION y agrotóxicos
-¿Por qué no existe una agenda más potente de temas ambientales dentro del Concejo Deliberante, teniendo en cuenta que se consideran derechos de nueva generación y que la ciudad tiene problemáticas que deben ser atendidas urgente porque afectan a la salud de la población como la aplicación de agrotóxicos?
-Se han hecho muchas cosas en Chacabuco y se han visto mejoras desde el 2015 a la fecha, aunque faltan un montón más. Se necesita una agenda municipal compartida con organismos nacionales y provinciales. Me parece que no está en la agenda política en general.
Lo que se puede hacer desde el Municipio es mejorar ciertas cosas, pero se necesitan otro tipo de recursos. Tiene que ser una política de acá en adelante. Pero en la Argentina de las urgencias y de la falta de cuestiones básicas no resueltas, hay otras que son tan importantes como estas que quedan al margen.
-La salud de las familias que viven alrededor de la planta de ARDION es urgente, viven chicos y tenemos un médico pediatra como Intendente, ¿no está dentro de las urgencias?
-Me parece que son urgencias a largo plazo. Si se incumplen las normas hay que hacer algo. Creo que se tienen que ajustar a las medidas que correspondan para que la empresa funcione y esté adecuada a las normas.
-¿No deberían pensar en la reubicación de esa empresa?
-Tiene que ser tratado por todo el arco político, y es una deuda el tratamiento de ese tema. Las empresas necesitan de plazos para hacer ciertas reubicaciones, y necesitamos de la conciencia, la sinceridad y la responsabilidad de toda la política.
-Las aplicaciones de agrotóxicos no respetan la legislación vigente, y hay cada vez más denuncias de parte de los vecinos que viven en zonas rurales.
-Eso no es así, tiene su control en función de la legislación. Hay gente que firma las recetas, que considera los vientos, las zonas de aplicación.
-No funciona el poder de policía del Estado.
-Creo que lo preguntás por una cuestión personal. Las temáticas ambientales son urgentes, y tienen que estar en agenda.
Corrupción, falta de transparencia, acceso a la información
-En Argentina, el problema de la corrupción parece ser siempre una cuestión del otro. El sector político que le planteó a la sociedad que había que terminar con eso fue Juntos. Los chats del Lago Escondido, el caso del dirigente Millman y los privilegios de la política, manejos de contratos y cajas de las que nadie da cuenta, el pedido de licencia de D'Allessandro, ¿cómo se salda?
-Con buena y rápida justicia. Cualquier político, sea del espacio que sea, tiene que ajustarse a la justicia y responder. Sea quien sea. En Argentina, si estamos como estamos, es porque nadie puede salvarse solo. Todos tenemos responsabilidad desde el 83 a la fecha. Algunos serán chorros y otros no, algunos serán capaces y otros no. Tiene que haber justicia, y tiene que ser rápida, transparente e independiente. Que traccione y condene a cualquier político o dirigente que participe de cualquier acto corrupto.
-¿Cuál es el esfuerzo que le hace falta hacer a la administración pública -en todos sus niveles- para transparentar el manejo de los fondos?
-Otra deuda de la democracia y de la política, es hacer más ágil y transparente cualquier tipo de contratación. Hoy desde el Estado, cualquier tipo de operación es un calvario. Para comprar cualquier cosa, necesitás cumplir con varios pasos que no garantizan transparencia, y además hay que considerar la inflación. Por eso, creo que hay que ir por una reforma del Estado en serio en ese sentido. Además, debería haber acceso público inmediato a la información.
-¿Dónde vas a estar en diciembre del 2023?
-Falta un montón. En principio tengo mandato en el Concejo por tres años más. Nunca se sabe con la dinámica de la política. Pero lo que más deseo es que la Argentina tenga expectativas de cambio, que traiga mejoras.
