A qué juegan los que quieren jugar
Ya estamos en campaña. Lejos de saltar la grieta, todo sirve pensando en ganar una elección. Hasta la reedición del cajón de Herminio Igesias. El sábado los libertarios, radicales y PRO fueron a la Plaza de Mayo y colgaron bolsas simulando estar cubriendo el cadáver de algún político o personalidad de la vida pública. Los radicales van a las urnas y el variopinto escuadrón de militantes no aiolistas puede meter un batacazo. De esa elección dependerá el margen de maniobra del Jefe Comunal para manejar la lapicera. Por ahora, levanta la candidatura de Ignacio “Nacho” Orsini y se mete en el conventillo del PRO. Los correligionarios están que trinan. El peronismo, amenazado por su interna que no quieren dar. Golía los desafía en las urnas, a los penales o en la plaza. Mientras tanto, Chacabuco es una ciudad fantasma. Responsabilidad compartida al 50% entre peronistas y radicales.